Bajo estos tres conceptos se desarrolla la nueva identidad visual corporativa. Una identidad alejada del mundo gastronómico y más próxima al mundo empresarial, más dinámico. Construida con una gama cromática a base de tonos tierra y grises nos aporta la calidez deseada con el producto. Se elaboró el estilo gráfico de la papelería y las cartas del menú, postres y vinos que combinaban imágenes de bodegones, la madera era la protagonista como el principal elemento y el símbolo como base de todas las aplicaciones gráficas.

La Sangiovesa es una franquicia a nivel nacional de restaurantes especializados en cocina italiana. En su fase de expansión necesitaban afianzar y sentar las bases de una identidad visual corporativa que le permitiese crecer de forma coherente, una identidad paraguas que agrupase todos los mensajes visuales dirigidos a sus franquiciados.